Crecer

Y entonces creces y te das cuenta de porque Peter Pan no quería crecer. Entiendes que la vida no está pintada de rosa. Que los sueños no se cumplen si solo los sueñas. Que la vida es cruel, bueno, que las personas son crueles. Comprendes que si quieres algo debes trabajar duro por ello, y que no siempre saldrás ganando, sin importar que hagas un berrinche. Que algunas veces el internet será tu mejor amigo. Y otras veces no tendrás amigos. Que cuando creces te sientes solo. Y sin la mas remota idea de que hacer. Ahora si, de una vez por todas, entiendes que crecer no es genial.

Te conoces a ti mismo, y te das cuenta que eres un monstruo. Comprendes que aunque hagas muchas cosas buenas la gente siempre verá lo malo. Que la pubertad no hace mucho en ti. Que madurar no sirve de nada. Que lo único que te agrada son tus amigos, pero sabes que ellos pronto harán sus vidas y se olvidaran de ti, y eso te deprime. Que tu vida se trata de desvelarse estudiando y de críticas para nada constructivas. Y empiezas a odiar a la sociedad. Y te sientes idiota porque de niño no podías esperar a crecer.

Y aquí estamos, deseando volver en el tiempo, y regresar a esos años en los que eras feliz pero no lo sabías. Cuando tu mayor dolor eran los raspones de la rodilla, y tu mamá sabía como hacerte sentir mejor, pero claro, ella era un Albert Einstein versión mujer. Cuando tus amigos eran solo compañeros de juego. Y solo pensaban en jugar, solo en eso. Cuando el que pensaban de ti no importaba nada. Cuando vestirse era una preocupación de tu mamá y no tuya. Cuando no existían las atracciones. ¿Recuerdas cuando todo era perfecto? ¿Desearías volver, no es cierto?

-María